VERSOS DISPERSOS
DE
RAMÓN F CHÁVEZ CAÑAS
HIPOTECA NACIONAL
Hipoteca
de la patria
es cada vez más inmensa.
Y muy pronto llegaremos
de la miseria a tal área
donde ya no habrá reversa.
Sólo embargo esperaremos.
Tenemos
hipotecada
tan frágil economía,
culturita con costumbres.
Religiones no
dan nada
de consuelo. Hoy es sangría
de ignorantes ya sin lumbres.
¡¿Hasta cuándo ignoto Dios
pararás esos abusos
de tus mal llamados clérigos
que con codicia alevós
y con sus sesos obtusos
viven infiernos espléndidos?!
El Dios responde calmado:
“No dejes en mí esa carga.
Ayuda y yo ayudaré;
pues tú ayudas al malvado
a que introduzca su daga
cuando tú votas por él”.
22
de agosto en 1994
A
DON PEDRO BERRÍOS
Cuando
tú recitabas / pöemas a la Luna
y cuando le cantabas / a ese monstruo bicéfalo,
—quien a corta distancia / siempre nos vigilaba
y que fiscalizara / las vidas una a una
de nosotros, criaturas, / metidas en su encéfalo
para así defenderlas / de fea Ciguanaba.
Cuando
en locuaz bohemia / nadie te comprendía
al recitar mil versos / de Don César Vallejo
o de algunos pöetas / de la lengua francesa.
Nadie en nuestro Pueblito / rusticón entendía
tus sonoras palabras / y tu pensar añejo
expresado en idiomas / de poesía princesa.
Eras casi gigante / llegando hasta dos metros,
con cabezona cana / e incipiente petaca;
con voz fuerte, de trueno, / más ademanes justos.
La infantil mente mía / ignoraba tus estros
y en acera de
lajas / cómodas cual butaca,
me extasiaba escuchándote, / ¡Bohemio de mil gustos!
14
de septiembre en 1974
FE INTERESADA
Vos
ocupás
a Dios
cuando
Él te conviene:
cuando
tiene soco / tu india gallina;
cuando
tienes huelgas / en tu cementera
o
porque tu hijo,/ con más gasolina,
se
estrelló en la curva / de la carretera.
Vos
le
pedís a Dios
un
loteríazo
o
que tu insolente / hijo pase en limpio
al
grado inmediato / siendo un impostor.
¡Qué
desvergüenza malsana, / qué aletazo!
cuando
este muchacho, / con desprecio olímpico,
cambió
sabios libros / por el bacilón.
Vos
injuriás
a Dios
si
falta un centavo
al
pagar burdel, / tabaco o alcohol;
mas,
cuando estás con pécoras / en tu palacio
ya
medio borracho dices: / ¡Soy vergón!
y
a ese tal dios me lo paso por…
Al
día siguiente / amaneces rancio.
Vos
pasarás
a Dios
por
los…, este día,
pero,
cuando estés / solo y despistado,
en
dura pobreza /y torpe agonía
mas,
tu cuero esté / mugre o acabado,
Dios
podrá perdonar / tus herejías
o
mandarte a tu infierno / bien ganado.
Vos
confundís
a Dios:
Él
todo perdona.
Pensás
que al morir / previa confesión
irías
al cielo / por buena persona.
Tal
crasa mentira / Diablo ha inventado
para
así ganarte / a su eternidad.
El
infierno mismo / aquí está instalado
y
por tu egoísmo acá sufrirás.-
18 de septiembre en 1994
LUNA DESVELADA
A las seis de esta mañana
tu
áureo brillo ha disminuido;
brillo
que te ha convertido
en
reina ya desvelada.
A siete de ahora mismo
eres
hostia sacrosanta
o
monedita de plata
surcando
el cielo al abismo.
Pasadas las ocho horas
lontananza
te ha absorbido.
Yo
me quedo sorprendido
de
observarte, ¡gran señora!
23 de septiembre en 1994
VAGUEDADES
Hoy
limpié mi escritorio de basuras.
Hoy
quemé centenares de papeles.
Hoy
destruí cuanto ayer creí laureles
guardados
en gavetas-sepulturas.
También arrinconé en
buhardilla
un
sinfín de pöemas despistados
más
apuntes en prosa deshauseados;
pero
no candidatos a hornilla.
Hoy guardé en diez desvanes
mil revistas
de
ciencias y de artes milenarias.
Hoy
desee yo tener mal centenarias
edades
de esas biblias tan simplistas,
para
lëer decenas de lo escrito
por
los sabios de siglos anteriores
desde
sofistas a grandes señores
para
algún día ser yo un erudito.
Ayer revisé bien mis
disparates
escritos
en los últimos diez años.
Mañana
concluiré mirando huraños
pergaminos
en mis escaparates.
Diez
gavetas quedaron muy vacías.
Sólo
dejé a todos los pöetas
del
verso y del pincel. Me tracé metas
para
guardar la prosa y elegías.
Quedaron en su puesto cien
imágenes
de
mis cuatro princesas con mi esposa
y alguna flor marchita: cierta rosa
encontrada
al limpiar mohosos márgenes.
Limpio
quedó estante y escritorio.
Ahora
me interrogo por mi alma:
¿cuándo
la limpiaré con toda calma
de
codicias, lujurias y de odio?
Mañana yo prometo hacer faena.
Le
pediré a mi dios, de las alturas;
pero
no al Jehová, de leyes duras
quien
sin tener razón da dura pena.
23 de
septiembre en 1994
SANTOS
CANSADOS
Los
santos del cielo / están muy viejitos.
¡Necesitaremos
/ santos nuevecitos!
Los
santos de Roma / ya están muy cansados
y
es posible estén / hasta bien sobados
del
pobre intelecto / por tanto rezar
para
interceder / frente del Creador
en
pro de este mundo / sin ningún pudor
para
del pecado / hacer su gozar.
Pobre
san Jerónimo / y san Agustín;
con
el san Ambrosio, / Francisco de Asís
y
san Agapito / con Santo Tomás.
Supongo
aburridos / deberán estar.
Roncos
o afónicos, / con callosidades
en
ambas rodillas / por estar hincados
pidiéndole
a Dios / perdone pecados
de
malos políticos / en mis vecindades.
Las once mil vírgenes / ya no hallan qué
hacer.
Por
ser mal fiadoras / hoy ni quieren ver
a
tantos idólatras / del señor dinero
desde
tiempos bíblicos / en el mundo entero.
Hoy
los santos piden / sean relevados
por
don Luther King / y Mahatma Gandhi;
por
Oscar Arnulfo, / José Garibaldi;
y
por muchos laicos / ya martirizados.-
30 de septiembre en 1994
MI CABALLITO DE PALO
Mi caballito de palo
constaba
de brotón largo
de
un árbol de tigüilote.
Mi
caballito de palo
fue
perfectamente horneado
antes
de hornear un jolote.
Medía,
a lo más, dos varas.
Dos
corcho-latas clavadas
en
la punta por cabeza
y
horqueta como trompa
con sus paradas orejas
le
volvían una tromba.
La
silla: hecha de cartón.
sus
patas: mis propios pies
para
por calles correr
junto
a ese inquieto montón
de
niños del vecindario:
otros
jinetes que a diario
armábamos
alegría
frente
a casa de mi tía
María
Josefa Chávez.
Estos recuerdos, ¿quién
sabe?
si
ya fueron olvidados
por
los que hoy son ciudadanos
en
cualquier parte del orbe;
pero
viven anidados
en
mil recuerdos lejanos
de
mi cerebro tan pobre.
06 de octubre en 1994
P
O E M A L Ú G U B R E
Cuando este cruel Estado / nos implante contómetros
para
medir por tiempo / prudencial y cobrarnos
un
vil impuesto por / muchos pasos no dados
al
caminar a pie: / cuadras, leguas, kilómetros,
buscando
nuestro pan, / en nuestra propia patria.
Cuando en nuestra rosada / y delicada tráquea
se
instale medidor / de volumen del aire
respirado
por nos, / y suframos desaire
similar
a aquéllos, / cuando cobran el agua
aun
cuando invocamos / a santísima virgen.
Cuando en tan nuestra seca / y cansada laringe
soportemos
vozómetros / en forma tan atroz
para
cobrarnos otro / impuesto alevós
por
todas las palabras / pronunciadas. ¡Aflige!,
pues aumentarán más / terribles sufrimientos.
Cuando,
también por nuestros / débiles pensamientos;
por
cruel sana intención / o, por tan torpe idea,
llevemos
sobre cuero / cabelludo una fea
máquina
tasadora / de otros viles impuestos;
entonces,
volverémonos / robot de carne y hueso.
Nos cobrarán por ver, / oír, oler. Por eso
mi
poema será / tildado de irreal;
concebido
por un / fulano, ¡ tal por cual!
de
pensamiento obtuso, / y corazón perverso;
de
conductas con mente / propias de viejo
verde.
No
es extraño: ha más de siglo / a Julio Verne,
juzgáronle
muy mal / pedantes de aquel tiempo;
burlándose
de aquello / parecido a un cuento
y
que a mediados de este / grosero siglo veinte
contra
viento y marea, / se volvió realidad.
Mi
lúgubre pöema / debe terminar ya.
Me
quedo pensativo: / esas malas agujas
que,
siendo como otras / enemigas tan mudas,
coartarían
aún más / tan poca libertad:
¡vil
sacra libertad / humana en el veintiuno!
¡Ah,
mal progreso humano, / siempre con su maldad!
11 de octubre en 1994.-
RECLAMOS AL MONSTRUO BICÉFALO
|
(ANASTACIO NAVAS,1902)
¡Oye, viejo volcán, / monstruo de dos cabezas!:
me tiene fastidiado / tu eterna intromisión
en mi tranquila vida / muy privada.
Es cierto que yo admiro, / con fervor, tus bellezas;
mas, esa vigilancia, / desde tu dimensión,
tiene a mi mente harto preocupada.
Si viajo por Cabañas / o por
Chalatenango;
si visito a
amigos, / allá, en Ciudad Merliot;
si aún estoy libando
/ en el Colegio Médico;
si paso por
las cien / calles de Soyapango;
si voy a
descansar, / rumbo a Costa del Sol,
hasta allí me ve tu ojo kilométrico.
Si al norte, en San Miguel; / o al sur de Santa Ana;
si subo por las cumbres / de Alegría o Tecapa;
si, subiendo voy / hasta Cerro
Verde,
jamás escaparé / de tu ojo
cual ventana.
¡Ni en la Costa
del Bálsamo, / ni en Cerro de Guazapa,
tu felina pupila / nunca me pierde!
Y, cuando algunas veces / me he ido al extranjero,
he sentido placer / por verme liberado
de esa tu gran retina inquisidora;
pero, en los consulados, / cuanto veo primero
es tu lomo cetáceo, / en pared enmarcado.
Entonces, … mi fiel alma
por ti llora.
Sé bien: tú me vigilas / por ser mayor hermano,
pues piensas que yo ando / en cosas de inconsciencias
y que al cruzarse nuestras, / quizá, torvas miradas
tú, por ser mineral; / yo: ser humano,
uniremos, tal vez, / nuestras claras conciencias
para proseguir juntos / tantas bellas jornadas,
olvidando este mundo de lo vano.
De ahora en adelante, / para mí, tú
serás
—por todo lo narrado / en
versos anteriores—
acusador tremendo e
inflexible…
O, ¿eres, por ventura, / mi fiel Ángel Guardián?…
Si fuese así, dispensa / mis yerros y temores,
¡¡Volcán CHINCHONTEPEC indescriptible!!…
|
Anastasio Navas
17de octubre en 1994
CUANDO YO MUERA
Cuando yo muera
seguiré escuchando
bajo la tierra o en
cualquier lugar
a tan vibrante lira de Martí
con su Guantanamera,
disfrutando
y con la Rosa Blanca fraternal
y otros bellos cantares al
mambí.
Disfrutaré gorjeos de
Domingo,
—el Plácido cantante de la España—,
y de trinos inmensos de
Carreras
cantando nibelungos cual
vikingo
o
interpretando a Verdi. Gran hazaña
de
ambos españoles de estas Eras.
Luciano
Pavarotti y Caballé:
gran
rey de los tenores, el primero,
reina
de las sopranos, la segunda,
arrullarán
mis huesos. Yo podré
sentirme
un buen difunto, un caballero,
gozando
en esa fosa tan profunda.
Oiré
a Donisetti y a Mozart;
a
Bethoven, Tschaikovsky, Leoncavallo;
Carlos
Chávez, Revueltas, mexicanos.
De
Neruda, Picasso, y de Casals
oiré
“Poema Veinte” y luego callo
para
ver a “Guernica” en sus arcanos.
Después
oír “Pesebre” angelical.
@@@@@
Cuando
resucitemos / en el año diez mil,
cantante
Pedro Vargas / con Gardel estarán
unidos
a Edith Piaff / y al ítalo Caruso
entonando
baladas, / tangos y un popurrí
con
todas mis canciones. / También entonarán
melodías maternas, / ahora ya en desuso.
Es inmortalidad / de todos mis
pöetas
que
nos hace vivir / en pura carne propia
los
misterios del Cosmos / poético e Infinito.
Para
materialista, /para ése no hay recetas
en
este inmundo mundo / donde todo se copia.
Sólo
lo terrenal, / para él, será bonito.
12 de febrero en 1995.-
DESESPERANZA
¿Hasta cuándo vendrá / el Redentor del Sur?
¿Dónde ahora estará /el vientre virginal?
¿Dónde estará Jesús / salvador de sub raza?
¿Habrá nacido hoy / por obra de un albur?
¿Estaría naciendo / en parto vaginal?
¿Habrá nacido ahora / esa noble esperanza?
¿Estará caminando / por calles de Calcuta
o por Ciudad del Cabo / en el sur africano?
¿O, en inmensas cumbres /del lago Titicaca?
¿Estará a esta hora / teniendo cruel disputa
con vil “dios esclavista” / estafador de hermano?
¿Estará en sucia cárcel / o clavado en estaca?
Los
cristos ya vinieron; / mas, cruel humano sordo
no ha querido ni oírlos / con voz de gran Verdad.
Vino el Mahatma Gandhi /a India milenaria;
Vino Buda o Gautama, / a quien hoy pintan gordo
porque el hombre no sabe / tan grande inmensidad
del Siddhartha Gautama / y de su vida diaria.
Mil
cristos ya vinieron; / pero el humano imbécil
no ha querido mirarlos / con luz de la Razón.
Vino José Martí / y Paladín Bolívar
y fueron maltratados /como pimpollo sésil.
Llegó don Abraham Lincoln / con su gran corazón
y no fue digerido, / ni siquiera en almíbar.
Vino el Santo de América: / Don Arnulfo Romero;
más curitas jesuitas / allá en Paraguay
asimismo jesuitas / aquí en El Salvador.
Y Señor Luther King, / orientando sendero
y los del kukuxklán / le dijeron “good bay”
mandándolo a la tumba / por ser muy soñador.
Con vida aún está: / nuestro Nelson Mandela;
el Paladín Cubano / llamado Fidel Castro,
el héroe chiapaneco / o Comandante Marcos
con grande
Rigoberta / Menchú, de eterna vela
alumbrando a sus Maya / con esa luz de astro
y muchos, muchos, muchos, / combatiendo a los
narcos.
No pidamos más cristos. / Tenemos suficientes;
no pidamos más mártires, / pues hay miles de miles
a través de la Historia, / a través del presente.
Procuremos mejor / hacernos eficientes
cumpliendo, de Jesús, / doctrinas tan sutiles;
respetando a humanos, / también al Medio Ambiente.
16 de marzo en 1995.-
¿CUÁNDO
VENDRÁ LA PAZ?
Cuando cruel tiburón / no engulla a sardinas;
cuando don gavilán / respete a palomas,
y tan feroz don león / ignore a gacelas;
cuando
ese cruel halcón / no cace más gallinas
y
fieros jaguarcitos / nunca, jamás se coman
a
tiernos venaditos, / ni lobos a abuelas.
Entonces
vendrá Paz / a esta ingrata Tierra;
y
malvado hombre blanco / será muy fiel hermano
de
toditas sub razas / en nuestro mundo
entero
y
se podrá olvidar /del infierno con guerra
porque
entonces no habrá / entes cuales gusano
y
en nuestro planeta / no habría un extranjero.
Cuando
a ningún niñito / lo devoren lombrices
y toda bella infancia / se cultive en escuelas;
cuando juventud plena / tenga excelente acceso
al saber tan sagrado /desde hondas raíces
sin infantil Adán / ni tan míticas Evas.
Entonces vendrá Paz / y espiritual progreso.
24 de marzo en 1995.-
CONTINUARÁ
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