Anastasio Jaguar

Anastasio Jaguar

Breve Biografía de ANASTASIO MÁRTIR AQUINO (1792-1833):

Único Prócer salvadoreño verdadero en siglo XIX. Nativo de Santiago Nonualco, La Paz. De raza nonualca pura. Se levantó en armas contra Estado salvadoreño mal gobernado por criollos y algunos serviles ladinos, descendientes, éstos, de aquéllos con mujeres mestizas de criollo o chapetón y amerindia; pues esclavitud inclemente contra: indígenas, negros, zambos y mulatos, era insoportable para el Prócer Aquino. Fue asesinado por el Estado salvadoreño en julio de 1833, —después calumniado hasta lo indecible, tratando de minusvalorar sus hazañas; así como hoy calumnian a Don Hugo Rafael Chávez Frías y, ayer, al aún vivo: Doctor Don Fidel Castro Ruz.

En honor a tan egregio ANASTASIO AQUINO, este blog se llama:

“A N A S T A S I O A Q U Í S Í”

sábado, 7 de julio de 2012

HEREJIAS, 39ava entrega


H   E   R   E   J   I   A   S

Trigesima novena entrega
Por Ramon F Chavez Canas

CCLXIX

“Cristeristas” del papado/ y reyes en Inglaterra;
protestantes luteranos,/ mormones y calvinistas;
con secta Moon corëana/ más judíos derechistas
y sin cuenta credos más/ existentes en la Tierra,

deberían compactarse/ para oponerse a cruel guerra
pues siendo cristianos puros/ serán más largos de vistas,
de oídas y pensamientos/ libres por inmensas pistas
conducentes al edén/ y no esclavos de vil perra

que les hace asesinar./ Formen un mundo ecuménico
pues paraíso está aquí./ El cuerpo también es templo
morada de nuestro Dios,/ y no de aquel dios falsario.

Cuidando al cuerpo mortal/ aspirarán al edénico
lugar celestial de Persia, —sólo por poner ejemplo—.
Respetando, por supuesto,/ vuestro mundo imaginario.-

CCLXX

Soles, lunas y estrellas,/ han cantado cuales gallos.
La Tierra en su pequeñez/ daba mensajes cercanos
con sus mares, más montañas/ y horizontes no lejanos.
Nieves, calores, tormentas,/ fueron excelentes ayos

o maestros naturales/ tan briosos cuales caballos.
Variedades de Natura,/ de gigantes hasta enanos,                     
en Flora y Fauna corrientes/ pudieron llevar de manos
a nuestros tatarabuelos/ cuando fueron papagayos

de lengua, no pensamiento,/ pues les estaba vedado
interpretar panoramas/ ofrecidos por Natura.
Bellezas de cielo, mar/ y tierra eran explotadas

por ambiciosos “cristeros”/ de fervor asolapado
diciendo: Tales bellezas/ son diabólica locura.
Pero en museos “cristeros”/ podían ser admiradas.

CCLXXI

Soles, lunas y estrellas/ han mostrado sus encantos
ajustados a las leyes/ matemáticas y físicas;
gëométricas, biológicas,/ filosóficas y químicas,
no a intersección milagrera/ atribuida a viejos santos.

Perfecta correlación/ de Ciencias causaba espantos
en fanáticos “cristeros”/ con neuronas también tísicas.
Ciego nunca guía a ciego,/ pues carece de logísticas.
Cristeros serían sordos/ con, de sirena, sus cantos

tratando de conducir,/ de acuerdo a torpe manera,
por laberintos errados,/ basándose en texto hebreo,
a nuestros tatarabuelos/ y a Humanidad entera.

Contradecir no podíase,/ sólo responder: yo creo;
al negar “verdad sagrada”/ rápido se iba hasta hoguera
para llevar a científicos/ a incierto eterno “recreo”.

CCLXXII

Soles, lunas y estrellas/ señalaban buen camino
a navegantes sin rumbo,/ a perdidos en desiertos
no espirituales, no, no;/ sino en caminos inciertos
de cosmografía plana/ sostenida por cretino.

El cosmógrafo italiano/ por poco gana cruel sino
al pretender demostrar,/ con argumentos tan ciertos,
cuanto ahora bien sabemos./ Honremos a nuestros muertos
calcinados en hogueras/ por pensar con sabio tino

al combatir  ignorancias/ con saber bien razonado
o fanatismos groseros/ impuestos por cura insólito
quien llegaría a negar/ hasta el número quebrado;

quien cultivó su insolencia/ desde cuando fuese acólito
creyendo tener en dios/ a un compinche bien armado.
¡Así piensa todavía/ curita llamado Hipólito! 

CCLXXIII

Trenes o ferrocarriles/ se desplazan majestuosos
sobre durmientes con rieles/ por kilómetros o leguas
cruzando raudos campiñas./ Nunca piden ni dan treguas
hasta llegar a sus metas/ cansados y sudorosos.

Pero si a trenes sacamos/ de rieles tan poderosos
obligándoles rodar/ sobre potreros de yeguas
o sobre autopistas finas,/ trenes sacarán sus lenguas
por esfuerzo exagerado;/ mas, carente de asombrosos

movimientos tan exactos/ e inútiles a la vez
tratando de controlar/ hasta/ últimos vagones.
Trenes quedan rezagados/ a un triste hazmerreír;

pues quisieron humillar/  a tal yegua y a tal res,
lo mismo a tanta autopista/ de poderosos camiones.
La moraleja será:/ mide tu buen competir.

CCLXXIV

Lo mismo pasó a “cristeros”/ ufanándose cual pavo
y continúa pasándoles/ por torpezas e ignorancias;
aunque ahora en menor grado/ aquellas falsas fragancias
de tanto “sabelotodo”/ ya no valen ni un centavo.

Tales “cristeros” idiotas/ hoy sólo son medio rabo
en sociedades conscientes,/ quienes guardarán distancias
entre curas altaneros/ con impías arrogancias;
quienes pretenden seguir/ mintiendo cual lo hace Gabo,

o Gabriel García Márquez,/ ¡aquel digno colombiano!,
Nobel en Literatura/ por mentiras literarias.
¡Señores oscurantistas:/ respeten a vuestro hermano!

No sean ferrocarriles,/ limítense a vuestras áreas.
De Ciencias casi no saben./ ¡Ya no sean más gusano!
Confórmense en rescatar/ diezmos sin doctrinas agrias.

CCLXXV

Jaguares, leones y tigres,/ hasta felinos caseros
son carnívoros solemnes/ porque así lo quiere Dios.
Si Gran Dios fuese un injusto/ no tendría adoración.
Dios es y será buen juez./ Sólo aquellos bandoleros

descendientes de primates,/ sin importar tantos fueros                 roban, estafan y matan,/ superando a un ser glotón
aún teniendo al momento/ segura y gorda ración.
¡Gulas de seres cristeros/ superan a carroñeros!

Carroñeros y carnívoros,/ cuando panzas son repletas
juegan con mansas gacelas/ hasta darles de mamar.
Gacelitas se retiran/ con sus pancitas completas;

pero cromañón malvado,/ despreciando al verbo amar,
atora sus alacenas/ para cien años o más.
¡Asco da versificar/ sobre tan gordas chuletas!

CCLXXVI

Similar pasa a cristeros:/ seudo cristianos perversos,
esclavizados al máximo/ por sionistas junto a turcos.
Éstos en El Salvador/ araron profundos surcos.
Tercera generación/ hoy roba bienes diversos.

Nuestros “hermanos” cristeros/ cantando pérfidos versos
quieren hacernos crëer/ que ellos jamás fueron burdos,
que apoyan y apoyarán/ a los filósofos zurdos.
Tales cantos de sirena/ no aceptamos ni a conversos.

Glotonerías “cristeras”/ sin parangón a la vista,
están hundiendo a especie/ humana ya sin salida.
Globo terráqueo desprecia/ al cristero; pero lista

está desde tercer siglo/ esperando la partida
de cristerismo y sionismo./ Gran bienestar comunista
similar al cristianismo/ se espera en moderna vida.


C  O  N  T  I  N  U  A  R  A...